Engaños de la industria alimentaria: galletas con L-Carnitina

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Hace ya algunos años salieron al mercado unas galletas de Cuétara llamadas «Fibra Due L Carnitina», anunciadas como quemadoras de grasa, a base de transformarla en energía. ¿Y cuál es el truco en estas galletas? ¿Qué hay de verdad en su publicidad? ¿Qué es la L-Carnitina y para qué sirve?

Voy a intentar dar unos datos referentes a este tema que espero sean de utilidad a todo el que lo lea.

Vayamos por partes:

¿Qué es la Carnitina?

La es un nutriente derivado del aminoácido esencial lisina. El cuerpo es capaz de sintetizarla a partir de la lisina y metionina con la ayuda del hierro y de las vitaminas C, B3 y B6.

Su función es acelerar la combustión de lípidos (grasa) para la producción de energía. Por tanto, una carencia de Carnitina puede provocar un aumento de la masa grasa del cuerpo. Sin embargo, no es necesario ingerirla directamente ya que el cuerpo puede sintetizarla a partir de otros nutrientes de la dieta.

¿Dónde se encuentra la Carnitina?

No sólo podemos sintetizar la Carnitina en nuestro cuerpo a partir de los componentes ya mencionados, sino que se encuentra en alimentos habituales de la dieta, principalmente de origen animal, como carne o derivados lácteos. La cantidad de Carnitina por cada 100 g de producto de algunos alimentos es:

  • Carne de ternera: 95 mg
  • Carne de cerdo: 27,7 mg
  • Bacon: 23,3 mg
  • Pescado: 5,6 mg
  • Pechuga de pollo: 3,9 mg
  • Pan integral: 0,36 mg
  • Macarrones: 0,126 mg
  • Huevos: 0,0121 mg
  • Zumo de naranja: 0,0019 mg

También se vende en forma de suplementos dietéticos, normalmente dirigidos a clientes de gimnasios interesados en reducir peso o aumentar su masa muscular, y se venden como «quemadores de grasas».

Causas y efectos de la deficiencia de Carnitina

La falta de Carnitina en el organismo puede deberse a variadas causas aparte de la falta en la dieta de los factores que influyen en su síntesis por parte del cuerpo y de la falta de la propia Carnitina:

  • Fallo genético en la síntesis de carnitina
  • Mala absorción intes
    tinal de la misma
  • Problemas hepáticos y/o renales, que afectan la síntesis
  • Defectos en el transporte de carnitina desde los tejidos de origen a los de destino
  • Aumento de la demanda de carnitina, por una dieta abundante en grasas, estrés, consumo de ciertas drogas (anticonvulsivos como el ácido valproico) y a causa de ciertas enfermedades

Las deficiencias de Carnitina son muy raras, aunque sus signos suelen ser fatiga muscular, calambres o envejecimiento prematuro. Otros síntomas son problemas de corazón tras sufrir un infarto o angina de pecho.

Usos de la L-Carnitina

Aparte de los ya mencionados suplementos de gimnasio, la L-Carnitina se utiliza médicamente para tratar diversos transtornos:

  • Anemia
  • Angina
  • Claudicación intermitente: dolor en las piernas causado por aterosclerosis en las extremidades inferiores.
  • Diabetes
  • Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC): combinación de bronquitis crónica y enfisema que resulta en obstrucción de las vías respiratorias y un transporte deficiente de oxígeno en los pulmones
  • Esguinces y desgarros (para evitar lesiones musculares relacionadas con el ejercicio)
  • Infarto
  • Infertilidad (masculina)
  • Insuficiencia cardiaca congestiva: enfermedad crónica que se produce cuando el músculo cardiaco ya no puede bombear la sangre con la eficiencia necesaria.
  • Síndrome de fatiga crónica
  • Triglicéridos elevados

¿Por qué las galletas con L-Carnitina no sirven?

En primer lugar, hay pocos estudios que demuestren que un aporte extra de L-Carnitina influya en la pérdida de peso. Si bien la Carnitina actúa como transporte de las grasas para ser quemadas y obtener energía, en caso de no existir deficiencia de Carnitina en el organismo, la toma de suplementos no acelerará el proceso.

Por otro lado, veamos la composición de 100 g de esas galletas:

Calorías: 438
Proteínas: 6,15 g
Hidratos de carbono: 63,67 g
Grasas: 17,42 g
G. saturadas: 3,16 g
G. monoinsaturadas: 11,74 g
G. poliinsaturadas: 2,52 g
Colesterol: 0 g
Fibra: 9,17 g
Sodio: 0,21 g
L-Carnitina: 150 mg

Lo que no dicen en ninguna parte es que para que pudiera tener algún efecto suplementar con L-Carnitina (de rendimiento más que de pérdida de peso), la dosis recomendada ronda el gramo. En el apartado anterior se pueden ver los usos terapéuticos de la L-Carnitina, para los que la dosis recomendada está entre 1 y 3 gramos.

Es decir, si 100 g de galletas contienen 150 mg de L-Carnitina, habría que comerse más de medio kilo de galletas. Y con eso lo que conseguimos es ingerir más de 20 g de grasas saturadas y más de 400 g de hidratos de carbono.

Aparte de salir un poco caro, esto provoca que para poder hacer uso de esa L-Carnitina habría que quemar en primer lugar esos 400 g de hidratos para empezar a consumir los 20 g de grasas saturadas (más de 100 g de grasas totales) y luego terminar con las grasas que teníamos.

Eso suponiendo que nos queden fuerzas después de consumir casi 3000 calorías, y también suponiendo que el efecto de ingerir L-Carnitina sea el deseado, es decir, aumentar el consumo de grasas, cosa que no está demostrada.

Lo que tampoco te dicen es que, para poder hacer uso de las grasas como combustible, hay que entrar en zona aeróbica, de manera que hacer ejercicio suave no sirve, salvo que te tires horas haciéndolo.

Conclusiones

Tenemos que ser muy prudentes a la hora de ver la publicidad con la que nos bombardean constantemente. Sobre todo en temas de nutrición, en la que muchísima gente tiene un desconocimiento bastante grande, y con lo que las grandes empresas no tienen ningún escrúpulo a la hora de engañar para vender sus productos.

Para perder peso, lo mejor es acudir a un especialista en nutrición, preferentemente médico titulado y hacer caso de sus consejos. Ninguna galleta, pastilla o dieta «milagrosa» nos va a quitar los X kilos de más que nos sobran así como así, sin nada a cambio.

Referencias

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12 comentarios en “Engaños de la industria alimentaria: galletas con L-Carnitina”

  1. ¡Muy buen artículo! No conocía estas galletas y me he quedado bastante alucinada. Habría tanto que comentar sobre la obsesión con las vitaminas, hormonas, ácidos grasos…

    (PS. Llegué hasta aquí desde el Planeta Menéame)

  2. Muchas gracias Agar (soy bokeron en menéame) 🙂

    De todas esas cosas también se pueden decir unas cuantas verdades, y de las proteínas también. A ver si saco tiempo para ellos, porque este lo he tenido aparcado varias semanas y hoy le he dado la pincelada final.

    Saluditos.

  3. Pingback: meneame.net

  4. Parece mentira que a estas alturas os extrañéis por eso. De qué coño sirve el aceite de naranja (es mas como se extrae) y por que las frutas del bosque son buenas para el pelo.
    ¿Por qué los remedios de la medicina milenaria china son cojonudos, si los chinos hace mil años se morían a los cuarenta?.
    ¿Por qué el salmón antes era estupendo, y ahora solo se puede comer una vez por semana?.
    ¿Por qué los ingredientes naturales son mejores que los artificiales?…las setas son naturales y algunas te matan.
    ¿Por qué la leche, los huevos, la miel…vale lo mismo para la piel, que para el pelo que para los callos?

    ¿Qué coño hacemos bebiendo leche con aceites de sardina? o Calcio extraído de la propia leche en la leche..¿que hacen con la leche a la que la han quitado el calcio? ¿yogures con bífidus activo?, bacteria que por otra parte llevan teniendo los yogures desde hace 3000 años.

    Hace unos días me compre un gel de baño que tenía un pH ácido de 5 que era según su leyenda estupendo para la piel del «hombre» supongo que para la de la mujer no…¿y no habíamos quedado que lo bueno era el pH «neutro»?…

    Vamos a ver si no nos extrañamos de estas cosas porque el 99% de los anuncios dicen una sandez…para eso son anuncios.

    SALUDOS

  5. guirlle, sólo puntualizar que el PH de la piel humana (hombre y mujer, no sólo hombre) es de 5,5. El PH neutro es 7, pero referido a la piel es 5,5. De ahí la confusión. El hecho de que quede más bonito decir «neutro» que «ligeramente ácido» no justifica eso, pero en este caso no llega a ser un engaño.

    Saludos.

  6. Guirlle
    lo de las setas lo llevo diciendo yo desde hace siglos, cada vez que alguien me dici que toma no se que plantas, le pregunto por los efectos secundarios y me responde,
    «Noo, si son plantas naturales, no tienen efectos secundarios…»
    y yo respondondo que tambien se puede conseguir veneno mortal de planas y setas… ¡muyyyy natural!

  7. Yo intento seguir siempre la máxima de todo es bueno y malo, depende la cantidad…

  9. No, es correcto lo de «zona aeróbica», pero puntualizando que se debe mantener cierta intensidad. El ejercicio suave, como bien dice el artículo, puede no ser suficiente para empezar a quemar grasas como combustible de forma significativa, pero eso también entra dentro de la zona aeróbica normalmente, y ahí es donde el artículo es un poco confuso. Por ejemplo un simple paseo también es ejercicio aeróbico, pues en condiciones normales el sistema cardiovascular podrá abastecer con suficiente oxígeno a los músculos, que es lo que caracteriza al ejercicio aeróbico frente al anaeróbico.

  10. Sí, es cierto que puede llevar a confusión lo del término «zona aeróbica» por la forma de continuar la frase. Es que mientras lo escribía me acordaba del anuncio, que salía alguien haciendo los típicos ejercicios de calistenia del colegio, esos que haces durante 10 minutos para estirar y entonar los músculos.

    A lo que me refiero es lo que dice «yomismo», que el ejercicio debe ser de suficiente intensidad y duración para que se empiecen a consumir grasas.

    vincent: qué gran verdad 🙂

  11. Pingback: www.negociame.com

  12. Pingback: El Fraude de las Leches Omega 3 - Culturismo & Fitness

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